22 de marzo de 2006

Monseñor Romero y el agua

Hoy fui al Centro de Gobierno a firmar contrato --en efecto: no estoy por ley de salarios, y tengo que trabajar para que me lo renueven al año siguiente; emocionante-- y en el Parque Cuscatlán había manifestantes que estaban bloqueando la calle y haciendo algo frente al hospital Rosales. Iban todos vestidos de blanco, y pensé que sería algo de las huelgas de médicos o empleados de hospitales que se arman antes y después de cada elección.
Pero al rato pasaron por la Juan Pablo II (¿actualizarán el nombre a Benedicto XVI o XVII?; no recuerdo ahora el número; veo la Wikipedia y... es XVI), frente al Centro de Gobierno, y resultó que era una marcha por el Día Internacional del Agua.
Me encantó la consigna:

"Con monseñor Romero,
el agua es primero."

No encontré la relación entre el arzobispo de San Salvador asesinado el 24 de marzo de 1980 y el problema del agua, pero de seguro es pura insensibilidad mía. En lo personal, me parece que tienen claros los objetivos (que son importantísimos), pero les faltan los fundamentos teológicos. Quizá si invocaran a la Virgen de la Cueva...

1 comentario:

Anónimo dijo...

Sí, sus fundamentos son algo flojos. el área de especizalización de Monseñor es otra.

Por lo menos, no le piden a San Isidro Labrador :-)


PD. Pensé que ya había escrito este comentario hace algunos días. Despistes que tiene uno.