Gracias, Ixquic*
Nuestra amiga Ixquic* hizo una reseña de una presentación del taller de danza folklórica de La Casa del Escritor, que se puede encontrar aquí. Mil gracias por haber asistido y otras mil por su generosidad.
El taller ya lleva como un año y medio de funcionar, y un poco menos de haberse constituido en el grupo Raíces. Está a cargo de Johanna Marroquín, quien se pasó diez años en el Ballet Folklórico Nacional (y otros tantos en otras partes) y baila por temporadas con Los Historiantes. (Antes lo hacía todos los fines de semana, pero no aguantó. Es más obsesiva del trabajo que yo, y ya es decir. Tiene otros dos talleres a su cargo, uno de adultos mayores y otro de niñas en la zona de Guazapa, donde nació, y con el primero también hace presentaciones frecuentes. Sin contar con el trabajo habitual de La Casa, claro, que siempre existe.)
Creo que el grupo comienza a consolidarse, con todos los altibajos previsibles y hasta necesarios. Hace poco los vi en una presentación para delegados centroamericanos a un congreso y sentí mucho orgullo. No sé cómo transmitírselo a ellos, pero creo que lo saben, o Johanna lo sabe y ya verá cómo los convence de que el señor serio de la barba no es tan serio, pero que habla en serio cuando habla. (O algo así.)
Gracias, Ixquic*.
El taller ya lleva como un año y medio de funcionar, y un poco menos de haberse constituido en el grupo Raíces. Está a cargo de Johanna Marroquín, quien se pasó diez años en el Ballet Folklórico Nacional (y otros tantos en otras partes) y baila por temporadas con Los Historiantes. (Antes lo hacía todos los fines de semana, pero no aguantó. Es más obsesiva del trabajo que yo, y ya es decir. Tiene otros dos talleres a su cargo, uno de adultos mayores y otro de niñas en la zona de Guazapa, donde nació, y con el primero también hace presentaciones frecuentes. Sin contar con el trabajo habitual de La Casa, claro, que siempre existe.)
Creo que el grupo comienza a consolidarse, con todos los altibajos previsibles y hasta necesarios. Hace poco los vi en una presentación para delegados centroamericanos a un congreso y sentí mucho orgullo. No sé cómo transmitírselo a ellos, pero creo que lo saben, o Johanna lo sabe y ya verá cómo los convence de que el señor serio de la barba no es tan serio, pero que habla en serio cuando habla. (O algo así.)
Gracias, Ixquic*.
1 comentario:
No había tenido tiempo de pasar por acá. Gracias a mí, nooooo.
Gracias al grupo, me parecen un buen ejemplo, yo los recomendaré en los espacios que pueda y si es posible les invitaré a algunos a los que tengo acceso.
A mi hija le encantaron. Fue la que más bailó con ellos.
Saludos.
ix
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