9 de mayo de 2006

Todos tenemos un pasado...


...incluso Valeria. Aquí está en su primera foto, totalmente desnuda y rodeada de agua, tomada a las trece semanas de gestación. Y la médica le pegó a la fecha: había dicho que nacería el 9 de junio y nació el 11. O sea que ya falta un mes para que tenga dos años...
Está aprendiendo la palabra "pelo", por cierto. Ya sabe decir "raya" (para referirse a lo que dibuja) y "barba" (para referirse a la barba). "Agua" es todo lo que se toma y "pan" todo lo que se come, excepto las galletas, que son galletas. Todos los perros se llaman "Natasha". Y así hasta alcanzar más de una docena de palabras relativamente articuladas.
Hoy se durmió a las diez de la noche, cuatro horas más tarde de lo habitual. Nos divertimos un montón haciendo de todo: comer yoghurt, ponerse ropa de Krisma como gorros, cantar la canción de "El oso y la casa azul", fingir que llorábamos y ponernos a reír (empezó porque en efecto se golpeó un pie, pero cuando ya empezaba a ponerse consentida no aguanté la risa, etc.). De todo, pues, aprovechando la soltería.
 Posted by Picasa

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Qué bonito!!! Las maravillas de la tecnología!!! Yo no tengo una de ésas :(

Rafael Menjivar Ochoa dijo...

Mejor, digo yo, así no te andan poniendo en internet. Por suerte mi madre no sabe mucho de esto. Tengo cada foto vergonzosa...

Anónimo dijo...

Todos tenemos más de una foto de la cual avergonzarnos. Con las de bebé, podría ser (para los niños) la típica sentado, con las piernitas abiertas, luego del baño sin nada más puesto que la sonrisa.
Para las niñas, la típica acostada boca abajo, con la cabeza levantada, sonriendo y llevando puesto solamente talco para bebé.
Debe de haber más de una mía en el arcón familiar.

Rafael Menjivar Ochoa dijo...

Bueno, tengo aqui´de mi hija mayor una como la que describes, pero juré no hacerla pública.
Y no te voy a preguntar cómo son las "más de una" que tienes en el arcón.

Anónimo dijo...

El problema no son las de bebé, al fin y al cabo uno no hacía más que posar sin darse mayor cuenta. Las que me tomaron siendo ya consciente de mis actos son las terribles. ji ji ji

Anónimo dijo...

Yo tuve una realmente vergonzosa: la de mi primer carnet electoral. Salí despeinado, lleno de acné y ojos entrecerrados. Como ustedes comprenderán, ese carnet desapareció a los pocos días de extendido.

Rafael Menjivar Ochoa dijo...

ArbolarioNunca tuve carnet electoral en El Salvador, por suerte; ya me tocó votar con DUI. Mi credencial de elector mexicana todavía la tengo. No quiero enseñarla, pero no es... uh... Bueno, sí es terrible.
Es que estaba malito.
Aldebarán: Nunca estuve tan borracho (de hecho nunca he estado borracho) y lo de la pornografía en mi caso más bien sería crimen de lesa humanidad. Hay algo cierto: hay una fiesta en la vida a la que uno no debió ir. Y hay que ir a esa fiesta esperando que nadie tenga una cámara.